El proyecto LIFE GySTRA, liderado por CARTIF, ha celebrado la jornada «Car Exhaust and environmental policies: the potential of remote sensing», con el fin de explicar cuáles son sus objetivos y debatir acerca del funcionamiento de la tecnología que permitirá dar una solución a la contaminación procedente de los vehículos en las ciudades.
El consorcio del proyecto reunió en Madrid a numerosas autoridades nacionales e internacionales, del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, el Ayuntamiento de Madrid, la Generalitat de Cataluña y la Comisión Europea, y a expertos del sector, para debatir sobre las nuevas políticas de movilidad sostenible que pretenden reducir los episodios de exceso de contaminación en las ciudades, así como explicar la tecnología que se va a aplicar.
La Unión Europea ha pedido a los países miembros «medidas que permitan controlas las emisiones reales e identificar a los vehículos excesivamente contaminantes», responsables del 80% de la contaminación generada por el tráfico rodado. Durante la jornada, el Director General de Medio Ambiente de la Comisión Europea, Daniel Calleja, destacó que «la preocupación por la calidad del aire se ha incrementado exponencialmente en los últimos años hasta colocarse como la segunda principal preocupación de los ciudadanos europeos según los Eurobarómetro».
Según Calleja, la Comisión Europea busca apoyar proyectos que, por un lado, traten de resolver un problema ambiental y, por otro, que favorezcan el emprendimiento e innovación generando una mayor competitividad. «Y el proyecto LIFE GySTRA es un ejemplo de ello» aseguró. Este proyecto pretende controlar y cuantificar las emisiones del tráfico rodado en situaciones reales de conducción a través de una tecnología de teledetección RSD+.
El dispositivo RSD (Remote Sensing Device) de detección remota detecta en menos de un segundo las emisiones reales de los automóviles que pasen entre sus sensores de humos. No existe, hasta ahora, ningún sistema a nivel mundial que mida las emisiones de los vehículos a distancia con la misma precisión. Estas mediciones no servirán para multar, sino que simplemente servirán como datos estadísticos e informativos.
Daniel Calleja aseguró que «gracias a este proyecto se podrán identificar las emisiones justo en el origen y así alertar sobre vehículos, marcas y modelos». Con este cometido, el proyecto pretende apoyar los esfuerzos de la Unión Europea por mejorar la calidad del aire en sus estados, según explican miembros del consorcio.
El representante del Departamento de Medio Ambiente del CIEMAT,Manuel Pujadas, reivindicó que 2ojalá que en un futuro veamos con la misma normalidad que controlen las emisiones de nuestros vehículos, como hoy vemos que controlen el exceso de velocidad».
Durante los próximos meses comenzará la recogida de datos de emisiones contaminantes a través de esta tecnología con los radares que se instalarán en la red viaria madrileña.